Orígenes de la Revolución Industrial en Inglaterra
La revolución industrial es el cambio en la producción y consumo de bienes por la utilización de
instrumentos hábiles, cuyo movimiento exige la aplicación de la energía de la naturaleza. Hasta
finales del siglo XVIII el hombre sólo había utilizado herramientas, instrumentos inertes cuya
eficacia depende por completo de la fuerza y la habilidad del sujeto que los maneja. El motor
aparece cuando se consigue transformar la energía de la naturaleza en movimiento. La unión de
un instrumento hábil y un motor señala la aparición de la máquina, el agente que ha causado el
mayor cambio en las condiciones de vida de la humanidad.
La tecnología
A comienzos del siglo XVIII las telas que se fabricaban en Europa tenían como materia prima la
seda (un artículo de lujo, debido a su precio), la lana o el lino. Ninguna de ellas podía competir
con los tejidos de algodón procedentes de la India y conocidos por ello como indianas o
muselinas. Para entonces, la producción de tejidos de algodón en Inglaterra era insignificante y
su importación desde la India constituía una importante partida de su balanza mercantil. Para
competir con la producción oriental se necesitaba un hilo fino y fuerte que los hiladores británicos
no producían.
Los cambios en la agricultura
El parlamento inglés, durante el transcurso del siglo XVIII, permitió cercar las fincas en el campo
abierto. El gasto que demandaba esta operación favoreció a los hacendados más ricos y permitió
la aplicación de nuevas técnicas para incrementar la productividad agrícola. Se empezó la rotación
de cultivos suprimiendo el sistema anterior de barbecho, se mejoraron las especies ganaderas
gracias al cruce de ejemplares seleccionados, se generalizó el cultivo de nuevas especies,
se mecanizaron las labores del campo, se aumentaron las superficies cultivables desecando
pantanos, y se logró un rendimiento mayor con la utilización de abonos.
El crecimiento demográfico y su interrelación con el desarrollo urbano
La mejor alimentación, resultante de la diversificación y de los mejores rendimientos de la
agricultura, permitió disminuir la mortalidad infantil y alargar la vida de los europeos. A ello
también contribuyeron los progresos de la medicina, especialmente el descubrimiento y la
aplicación de la Vacuna para atajar las epidemias periódicas que diezmaban la población.
La organización del trabajo y los problemas sociales
Las transformaciones económicas que originó la Revolución Industrial alteraron las estructuras
sociales vigentes desde la Edad Media. En las zonas rurales, el campesino se desvinculó del señorío
feudal y se convirtió en un jornalero cuyo trabajo se retribuyó con un salario. En las ciudades, el
artesano que trabajaba su propio taller se trasladó a las fábricas en calidad de obrero asalariado y
pasó a depender del propietario de las máquinas. Esta nueva situación constituyó el germen de las
alteraciones campesinas y de las revoluciones obreras que acontecieron durante la segunda mitad
del s. XIX en Europa.
Segunda revolución industrial
Entre los años 1880 y 1914, el desarrollo industrial se extendió a nuevos países y adquirió un ritmo
acelerado. Este fue de tal magnitud que muchos historiadores han denominado este período como
el de "la segunda revolución industrial".
El progreso científico y la aplicación tecnológica
Como vimos, las industrias textiles y siderúrgicas fueron las primeras en desarrollarse. Los ingleses
contaban con abundante algodón proveniente de la India a bajo precio, por lo que crearon
grandes manufacturas textiles que terminaron por desplazar al lino y a la lana en la confección
del atuendo entre los europeos. Para ello, desde mediados del s. XVIII, contaron con la progresiva
aparición de nuevos inventos que facilitaron una rápida y abundante producción.
El avance de los medios de comunicación
Uno de los acontecimientos más destacados durante la segunda mitad del s. XIX, fue la población
y colonización de nuevas tierras. Trece millones de europeos se desplazaron a los Estados Unidos,
otros se dirigieron a Australia y al algunos países de Sudamérica. California y Australia ejercieron
especial atractivo sobre los buscadores de oro. Este sorprendente movimiento migratorio se pudo
realizar porque los transportes se abarataron y facilitaron a los campesinos, que no encontraban
trabajo en las ciudades europeas, el traslado a tierras donde existían mejores expectativas
laborales. En 1869, se abrió el Canal de Suez que acercó Europa al Lejano Oriente; más tarde, se
construyó el ferrocarril en el Istmo de Panamá y, finalmente, se construyó en 1914 el canal que
une el Atlántico con el Pacífico.
El apogeo del capitalismo
El nuevo sistema industrial exigió un cambio en el mundo de las finanzas. Las antiguas sociedades
integradas con capitales familiares fueron cediendo ante la aparición de las grandes sociedades
anónimas, indispensables para costear los gastos que demandaban la fabricación de las máquinas
y la construcción de los ferrocarriles. Gracias a esta concentración del capital, se formaron los
grandes bancos internacionales y el crédito permitió emprender obras cada vez más costosas y
más rentables. Así se fue afirmando progresivamente a lo largo del s. XIX un sistema económico
en el que la dirección de las empresas pertenecía exclusivamente a los poseedores del K: el
capitalismo.A ello colaboraron diversos factores: la libertad de enriquecimiento que benefició a
quienes poseían la capacidad empresarial, la economía de mercado basada en el libre juego de
la oferta y la demanda en la fijación de precios y salarios, así como la formación de las nuevas
sociedades anónimas capaces de concentrar el capital indispensable para financiar los elevados
costos del maquinismo
Algunos Inventos, descubrimientos e innovaciones en el siglo XVIII
1709 Cristófori (Italiano) Piano
1714 Fahrenheit (Alemán) Temómetro de Mercurio 1778 Jouffroy (Francés) Bote de Vapor Experimental
1745 Von Kleist (Alemán) Botella de Leyden
1745 Musschenbroeck (Alemán) Botella de Leyden 1783 Montgolfier (Francés) El Globo
1752 Franklin (EE.UU.) Pararrayos
1761 Harrison (Inglés) Cronómetro
1769 Watt (Escocés) Máquina de Vapor
1770 Cugnot (Francés) Carro de Vapor
1774 Priestley (Inglés) Oxígeno
1777 Miller (Inglés) Sierra Circular
lgunos Inventos, descubrimientos e Innovaciones en el siglo XIX
1800 Volta (Italiano) Pila
1802 Symington (Escocés) Bote Vapor
1824 Aspdin (Inglés) Cemento Portland
1828 Henrry (EE.UU.) Electromagneto
1835 Talbot (Inglés) Fotografía
1837 Davenport (US) Motor CD
1837 Morse (EE.UU.) Telégrafo
1845 Hoe (EE.UU.) Rotatíva
1846 Howe (EE.UU.) Máquina de coser
1847 Staite (Inglés) Lámpara de Arco
1849 Bourding (Francés) Turbina Gas
1849 Francis (EE.UU.) Turbina Hidráulica
1858 Siemens (Alemán) Horno para acería
1864 Marcus (EE.UU.) Automóvil Experimental
1866 Nobel (Suizo) Dinamita
http://www.youtube.com/watch?v=ikTKgJmEzYs
Paula Álvarez Cerón 4ºESO-A